|DATOS QUE PUEDEN SALVAR VIDAS

— Si quedas atrapado en un coche sumergido (más de la mitad), espera con calma a que el vehículo se inunde completamente antes de intentar abrir la puerta.

— Si te encuentras en un edificio en llamas, mantente cerca del suelo para evitar el humo tóxico y busca salidas alternativas.

— Si te quedas atrapado en un ascensor, utiliza el botón de emergencia y espera ayuda en lugar de intentar abrir las puertas por ti mismo.

— En caso de robo, evita mirar directamente a los ojos del ladrón para disminuir el riesgo de confrontación.

— Memoriza números de emergencia clave o contacto de alguien cercano.

— Si te pierdes en la naturaleza, sigue la regla de "dejar rastro" marcando tu camino con objetos o señales.

— Si te pierdes en el bosque, busca un río y síguelo: es probable que te lleve a una zona habitada.

— Si te enfrentas a un animal agresivo, mantén la calma y retrocede lentamente sin dar la espalda.

— Si te muerde una serpiente venenosa, no succiones el veneno ni hagas un torniquete: mantén la herida por debajo del nivel del corazón y busca ayuda médica lo antes posible. 

— Si te atragantas y estás solo, puedes practicarte la maniobra de Heimlich usando el respaldo de una silla o el borde de una mesa.

— Conoce la ubicación de salidas de emergencia en lugares que frecuentas.

— Si un perro guía se te aproxima sin su dueño, síguelo rápidamente: podrías salvar la vida de alguien.

— Tumbarte de espaldas te da más posibilidades de sobrevivir a la caída de un ascensor.

— Si tu casa comienza a oler raro o como a pescado sin razón aparente, 9 de cada 10 veces significa que se está produciendo un incendio eléctrico.

— Si alguien intenta secuestrarte, asegúrate de arañar a tu atacante, ya que de esta forma su ADN quedará debajo de tus uñas.

— Si te encuentras con un oso polar, no corras ni te quedes quieto: camina lentamente hacia atrás y habla en voz baja.

— Si te quedas atrapado en una avalancha, escupe para saber hacia dónde está la superficie y trata de cavar en esa dirección.

— Si te caes sobre las vías del metro, no intentes subir al andén: busca un hueco entre los raíles o debajo del borde y métete ahí.

— En caso de un terremoto, protégete bajo muebles sólidos y evita las ventanas y objetos que puedan caer.

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