Un estudio de la Universidad Estatal de Nueva York indica que ciertos componentes del semen podrían tener efectos positivos en la salud mental de las mujeres, reduciendo síntomas depresivos.
Un equipo de científicos de la Universidad Estatal de Nueva York presentó un estudio que sugiere que el semen podría tener propiedades que benefician la salud mental de las mujeres.
De acuerdo con los investigadores, las sustancias químicas presentes en el líquido seminal no solo mejoran el humor, sino que también podrían actuar como antidepresivos naturales, aliviando los síntomas de depresión en mujeres que mantienen relaciones sexuales sin el uso de protección frecuente.
El estudio analizó la vida sexual y la salud mental de 293 mujeres para establecer una posible relación entre la exposición al semen y el bienestar psicológico.
Los resultados mostraron que aquellas mujeres que tenían relaciones sexuales sin preservativos demostraron un mejor rendimiento en pruebas cognitivas y exhibieron menos signos de depresión en comparación con las que usaban protección regularmente.
Los científicos identificaron varios componentes del semen que podrían estar detrás de los efectos positivos observados. Entre ellos se encuentran el cortisol, la estrona y la oxitocina, sustancias conocidas por su capacidad para influir en el estado de ánimo y promover sensaciones de bienestar.
El cortisol es una hormona que, en pequeñas dosis, puede ayudar a manejar el estrés; la estrona es un estrógeno que está vinculado a la regulación del humor; y la oxitocina, a menudo llamada la “hormona del amor”, está asociada con sentimientos de apego y felicidad.
Este hallazgo generó un debate en la comunidad científica y entre el público general. Si bien los investigadores destacan los beneficios potenciales, también subrayan que el estudio no promueve la práctica de tener relaciones sexuales sin protección, dada la importancia de evitar infecciones de transmisión sexual y embarazos no deseados.
Los autores del estudio recomiendan que se realicen más investigaciones para entender mejor las implicaciones de estos resultados y cómo podrían aplicarse de manera segura en el contexto de la salud mental.
Además, los expertos en salud advierten que la mejora del estado de ánimo a través del semen no debe ser vista como un sustituto de los tratamientos tradicionales para la depresión, como la terapia o la medicación.
Es fundamental que cualquier persona que experimente síntomas depresivos busque ayuda profesional para recibir un diagnóstico y tratamiento adecuados.
Aunque este estudio abre una nueva ventana a la comprensión de cómo ciertos componentes biológicos pueden influir en la salud mental, es vital abordarlo con cautela y no tomarlo como una invitación a cambios en el comportamiento sexual. La salud mental y sexual debe ser tratada con seriedad, considerando todos los factores y riesgos involucrados.
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